¡Luchar contra la precariedad menstrual con Beautikini!
Imagine un mundo donde el género determina el precio que pagas por los bienes y donde millones de personas no pueden acceder o permitirse comprar productos menstruales. Esta cruel realidad se conoce como precariedad menstrual y la tasa rosa.La precariedad menstrual es un problema generalizado que afecta a más de 500 millones de personas en el mundo. Engloba diversos desafíos a los que se enfrentan aquellas que tienen dificultades para gestionar sus menstruaciones debido a limitaciones financieras, a la falta de acceso a instalaciones seguras, a tabúes culturales, a discriminaciones, a la falta de educación y a sentimientos de vergüenza o miedo a pedir ayuda.
No se trata de un problema menor, sino de una verdadera crisis de salud pública. En el mundo, 1,7 mil millones de personas no tienen acceso a instalaciones sanitarias básicas y el 40 % no tiene con qué lavarse las manos en casa. Sin agua limpia ni instalaciones adecuadas, la gestión de la menstruación con dignidad se vuelve extremadamente difícil y aumenta los riesgos de infecciones genitales y urinarias.
Además, las personas con discapacidad enfrentan aún más obstáculos para acceder a los recursos y las instalaciones necesarias para una higiene menstrual adecuada.
Las consecuencias de la precariedad menstrual van más allá de la salud física; también afectan el bienestar emocional. El estigma que rodea la menstruación, asociado a estas barreras, puede tener efectos profundos en quienes menstrúan.
Examinemos algunas estadísticas alarmantes sobre la precariedad menstrual en el mundo:
- En el Reino Unido, el 40 % de las chicas se han visto obligadas a usar papel higiénico porque no podían permitirse comprar productos menstruales.
- Una encuesta de 2021 en Estados Unidos reveló que cerca de una cuarta parte de las estudiantes adolescentes han experimentado la precariedad menstrual.
- En Australia, más de una persona de cada cinco ha tenido que improvisar con productos menstruales debido al costo, y el 49 % ha usado una compresa o un tampón durante más de cuatro horas por falta de suficientes provisiones.
- El Banco Mundial estima que al menos 500 millones de mujeres y niñas en el mundo no tienen acceso a las instalaciones necesarias para gestionar su menstruación.
La educación también se ve significativamente afectada por la precariedad menstrual. Las estudiantes pueden faltar a la escuela o tener dificultades para concentrarse, lo que compromete su rendimiento académico. Por ejemplo:
- El 46 % de las australianas ha faltado al menos un día completo de escuela debido a su menstruación.
- El 74 % de las australianas encuentran difícil concentrarse en la escuela debido a su período, y el 46 % declara tener resultados inferiores en los exámenes o en las tareas.
- En el Reino Unido, más de 137,700 niñas faltaron a la escuela el año pasado debido a la incapacidad de permitirse comprar productos menstruales.
Dado todos estos beneficios, le recomendamos encarecidamente que explore la gama de ropa menstrual que ofrece Beautikini. Sus productos están diseñados con un enfoque en la comodidad, la funcionalidad y la durabilidad. Con Beautikini, puede tener un impacto positivo en el medio ambiente mientras disfruta de una experiencia menstrual más cómoda y sin complicaciones.
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